Complicaciones renales secundarias a COVID-19
DOI:
https://doi.org/10.33734/diagnostico.v59i3.235Palabras clave:
COVID-19, sistema renina-angiotensina-aldosterona, injuria renal agudaResumen
Los pacientes tratados con inhibidores o bloqueadores del sistema renina-angiotensina-aldosterona (SRAA) no muestran un riesgo incrementado para la infección con COVID-19 ni de desarrollar un estadio más crítico de la enfermedad. Al momento de ser hospitalizados, los pacientes con COVID-19, en una proporción elevada presentan proteinuria y hematuria. Reportes de Europa y los Estados Unidos muestran que los pacientes con COVID-19, que requieren de cuidados intensivos, presentan una incidencia de injuria renal aguda (IRA) en un porcentaje del 20% al 40%; el inicio de la IRA, tiene una relación temporal con el comienzo de la ventilación mecánica. Los hallazgos patológicos en estos pacientes indican la presencia de necrosis tubular aguda como causa principal de la injuria renal. Aproximadamente el 14% de pacientes con IRA, requiere de terapia de remplazo renal, y están asociados a tasas de mortalidad del 35% al 55%. Ante un incremento súbito de pacientes con COVID-19 e IRA, los sistemas de salud necesitaron de esfuerzos extraordinarios para poder proveer personal médico especializado y de equipos para terapia de diálisis.